De Alaska a la Patagonia en dos años [ABANDONADO]

Iniciado por ocon, Septiembre 17, 2015, 18:16:19 pm

Tema anterior - Siguiente tema

0 Usuarios y 2 Visitantes están viendo este tema.

ocon

Septiembre 17, 2015, 18:16:19 pm Ultima modificación: Abril 11, 2021, 13:45:17 pm por Kenar
Hola, si bien este no es un viaje de larga duración estandar, es cierto que este viaje de Alaska a la Patagonia lo hemos hecho y queríamos compartir de alguna forma un pequeño resumen de esta experiencia que nos llevó 25 meses de nuestras vidas.



El viaje lo hicimos en varios vehículos, pero todo Norteamérica lo recorrimos con una GMC Vandura de 1986 camperizada de fábrica que compramos a un dealer en Seattle. La furgo tenia mucho encanto, era la de la mítica serie del Equipo A y la distribución del espacio fabulosa. Cama fija, cocina, nevera, fregadero, asientos giratorios...la única pega que le encontramos era el consumo que con sus 6 cilindros consumía alrededor de 17 litros en llano.
Quienes tengáis el calendario de Furgo VW de 2013 podéis ver la foto de la misma en el Valle del Fuego de Nevada.

[Capitulo 1- NORTEAMÉRICA]





Cita de: undefined[...] Durante los días que tardamos en hacer los papeles, equipar la furgo y comprar víveres antes de partir hacia Alaska, nos alojamos en casa de unos couchsurfers en Seatle con los que hemos contactado previamente. Cuatro estudiantes en una casa de alquiler con un sillón libre que muy amablemente nos invitan a ocupar. Vivimos por unos días en medio del salón, con poca privacidad pero arropados por la hospitalidad de todos ellos. Es nuestra primera experiencia de Couchsurfing; pero a partir de ahora será algo que repetiremos puntualmente en diferentes países a lo largo del viaje. Además de ahorrarnos un dinero en el alojamiento siempre hacemos buena amistad con nuestros anfitriones y esa es la filosofía de "viajar de sillón en sillón".
Cuando alguien te invita a su casa sin pedir nada a cambio es porque tiene el corazón abierto, una predisposición para conocer a otras personas, a otras culturas y probablemente porque alguna vez él también lo ha necesitado. Confianza y hospitalidad, algo tan sencillo como carente en nuestra sociedad actual donde el miedo atrae a la cautela y con ésta desaparece la esencia del ser humano, de la curiosidad hacia el viajero, del recibimiento entre culturas y en definitiva de esos hilos invisibles que teje la vida.

Con nuestra nueva compañera equipada, estamos listos para dar comienzo a esta gran empresa. Pero antes de partir nos queda una importante tarea, la tenemos que bautizar.
Por su parecido físico y el simbolismo que conlleva decidimos llamarle "El elefante de hojalata", el que nos abrirá todos los caminos y superará todos los obstáculos. Seguramente nunca imaginó que a sus 26 años y llevando los últimos 8 parada en el jardín de una casa como refugio para comer hamburguesas, volvería a salir otra vez de viaje por los estados de América. Quien le iba a decir que pisaría una vez más las nieves de Alaska, que surcaría de norte a sur la cordillera de las montañas rocosas, que atravesaría el infierno del Death Valley en pleno agosto y hasta que se enfrentaría cara a cara con un oso. Quien nos iba a decir todos los amigos que haríamos por el camino, las veces que nos echarían una mano, los lugares tan increíbles que descubriríamos y los momentos difíciles que nos tocaría superar. Un montón de aventuras nos esperan junto a este viejo elefante, pero eso sí, ni él, ni nosotros, ni nadie sabe lo que la senda nos depara.
[Fragmento del libro: De Alaska a la Patagonia en elefante   www.librosqr.com]




La GMC del 86, o el Elefante de Hojalata como bautizamos, si bien consumía mucho, era un vehículo perfecto para moverse por Norteamérica ya que hay muchos modelos similares pero muy pocas camper, lo que hace que sea fácil de "camuflar" y es que en norteamérica no se puede pernoctar dentro de un vehículo o no es legal, pero con una camper en la que nadie se imagina que estas durmiendo dentro ese es un problema menor.







Y así entre carreteras solitarias, paisajes inhóspitos y una fauna salvaje recorrimos los territorios más salvajes de British Columbia, el Yukón, y Alaska.
Nuestra idea era seguir la cordilera de las montañas rocosas y así empezamos en los parques naturales de jasper y Banff en Canadá, para continuar por Glacier NP en la frontera con EE. UU. Luego seguimos ruta por Yellowstone, Grand Teton NP, Arches un Utah, Canyonlands, Zion, Bryce, Monument Valley y el mil veces nombrado Gran Cañón del Colorado. Esta ruta de los parques naturales es maravillosa y sin duda un escaparate a los escenarios más espectaculares de todo Estados Unidos. Pero la naturaleza siempre tiene dos caras, la hermosa y la salvaje y en alguna ocasión vimos como el peligro nos miraba a los ojos y sentimos su aliento en nuestro rostro. Aquí podéis ver un vídeo de uno de los peores momentos de todo el viaje:

https://www.youtube.com/watch?v=t0OLox1RlHU


Por supuesto, los encuentros son parte imprescindible de un gran viaje, y a pesar de que en Norteamérica son sus paisajes lo que nos enomaró, conocimos gente fantástica, hospitalaria y lejana a los estereotipos que tenemos de los americanos. Igualmente coincidimos con grandes viajeros como el Asturiano Alvaro Neil, "el Biciclown" (10 años dando la vuelta al mundo en bici), Mikel Silvestre o Alicia Sornosa entre otros.



Otras veces los encuentros no eran con personas sino con animales y alguno de ellos como el oso de este vídeo hasta nos dejo un arañazo de sus garras grabado en la chapa de nuestra furgo, un herida de guerra...

https://www.youtube.com/watch?v=cmrQWnlB09w



En nuestra última etapa en USA, atravesamos el Desert Valley y el parque nacional de Yosemite entre sus Sequoias gigantes hasta llegar a San Francisco, donde tomamos una de las rutas escénicas más espectaculares de este país, la Ruta 1, que va paralela a la costa entre acantilados, playas desiertas y pequeños pueblos de surfistas y pescadores hasta llegar a Los Ángeles.



Aquí fue el final de nuestra primera furgo de este viaje y no es que se estuviera portando mal, sino todo lo contrario, estábamos encantados, pero las reglas del viaje cambiaban al cruzar la frontera de Tijuana y la seguridad de una furgo en Nortamérica aquí se convertía en peligro, ir en nuestros propio vehículo por otro lado nos alejaba de la realidad de latinoamérica, de sus gentes, sus transportes, sus casas y si queríamos vivir la cultura de centroamérica de verdad y convivir con ella, teníamos que vender nuestro vehículo y continuar a pie, en autobús, autostop, barco y cualquier forma de transporte que nos acercase a Ushuaia en el extremo sur de la Patagonia.




[Capitulo 2- MEXICO]



Entramos a Mexico por Tijuana, una de las fronteras más delicadas y con peor reputación de américa y la verdad el pasillo de la frontera americana más que el de un edificio parecía un tunel del tiempo, de repente retrocedimos 70 años y nos encontramos con el jaleo y la vitalidad de una ciudad mexicana, llena de ruidos, colores, alboroto, alegría, peligros...

Cita de: undefinedVolver a la mochila después de 5 meses en un coche es como levantarse para trabajar después de una noche de fiesta, además de que te duele todo el cuerpo no apetece nada, especialmente cuando cargas tanta tecnología y cosas como nosotros. Lo que hasta ahora pasaba desapercibido en la furgo se convierte en 30 kg en mi mochila y 22 kg en la de Noe...
[Fragmento del libro: De Alaska a la Patagonia en elefante ]www.librosqr.com



Atravesamos los 2 kilómetros de la Baja California en un ambiente tranquilo y desde La Paz al sur, tomamos un ferri que nos atraviesa a Mazatlan donde comienza el méxico de verdad, el de los tacos en cada esquina, los chiles serranos y los carteres de la droga... pero por encima de todos los estereotipos del país de los mariachis, están sus gentes. Alegres, abiertas, y con un cariño especial hacia los españoles. Atravesamos Mexico zizagueando por el país de punta a punta, y lo que en el calendario estaba planeado ser un mes de estancia se transforman en tres meses de gloria. Del festival Cervantino de Guanajuato a las selva de Xilitla y todas esas maravillas de la naturaleza que la rodean, el sotano de las golondrinas, el puente de Dios, el nacedero del río Huichihuayan o las pozas surrealistas de Edwar James.



Cita de: undefinedEstablecemos nuestro campamento en Xilitla y a pie, en autobús o autostop vamos explorando sus alrededores que nos dejan pasmados una y otra vez. Las cascadas de Micos, el puente de Dios, el nacimiento del río Tambaque o el del Huichihuayan... El río Huichihuayan brota literalmente de entre las piedras con un azul tan cristalino que deslumbra a los rayos del sol que a duras penas atraviesan el manto de la selva. Un lugar mágico e inspirador, donde bañarse, leer o simplemente descansar es todo un privilegio.

Cuando regresamos hacia Xilitla en un autobús local, una mujercita nos pregunta de dónde somos y comienza una conversación.

- ¿y cuánto tiempo lleváis en México?
- Un mes casi...

Sorprendida nos dice

- ¡Pero qué bien habláis español para tan poco tiempo!

 Le tratamos de explicar que en España se hablaba el mismo idioma, pero todavía se sorprende más.

Es con historias como esta o como la del hombre que nos preguntaba si en el resto del mundo se usaban los pesos mexicanos, donde se ve la inocencia y humildad de la gente. No conocen otra cultura que la que les rodea pero no por ello dejan de tener curiosidad por quien llega de fuera, siendo realmente amables y hospitalarios hacia el viajero. Estados Unidos nos sorprendió por su naturaleza salvaje y México lo está haciendo por la nobleza y sencillez de sus gentes. Después de 4 semanas recorriendo el país podemos asegurar que la protección y el cariño de los mexicanos superan con creces los conflictos y el miedo que el narcotráfico ha creado. Es cierto que México no es el Tibet y que la muerte, arraigada en su cultura y tradiciones, es algo tan natural como la vida misma, pero igual de cierto es que el viajero se siente arropado por éste pueblo antes que amenazado.
[Fragmento del libro: De Alaska a la Patagonia en elefante   www.librosqr.com]

Volvemos a travesar medio país para celebrar el día de muertos en la isla de Patzcuaro, y luego nos adentramos en las montañas michoacanas para ver la llegada de la mariposa Monarca. Oaxaca es uno de los estados que nos enamora con sus pueblos mancomunados, sus cascadas petrificadas o esas playas salvajes de Mazunte en pleno pacífico. Continuamos por la San Cristobal de las Casas y nos exploramos la selva de Chiapas en busca de los indígenas lacandones que las habitan.
Las ruinas mayas empiezan a brotar entre ceibas y una exuberante vegetación y en bici, autobus y autostop seguimos avanzando por la península de Yucatan en busca de un lugar tranquilo junto al Caribe donde pasar las navidades, llevamos ya 8 meses de viaje y lo que planeamos hacer en una año tiene pinta de que se va a dilatar bastante en el tiempo...

Estando tan cerca, decidimos dar el salto a Cuba para conocer de  cerca este país y su anquilosado modelo comunista, pero hay otra motivación para hacerlo, nos hemos enterado de que desde México se puede volar gratis a Cuba, te pagan el billete de avión y el visado... y la emoción que nos despierta descubrir ese "sistema" nos lleva a embarcarnos en esta aventura...


[Capitulo 3- CUBA]



Estamos en la península de Yucatán en México y hemos llegado hasta aquí para pasar las navidades entre pirámides mayas, playas de arenas blancas y agua cristalina, buceo en los misteriosos cenotes y kitesurf. Pero además el motivo de haber llegado hasta aquí es porque desde Cancún hay una forma de volar gratis a Cuba, un negocio que lleva funcionando muchos años, un pasaje en el limite de lo legal y lo ilegal, y después de conocer a unos cuantos viajeros que nos han contado esta historia, queremos probarlo en primera persona. Así que equipados con 2 maletas de 20 kilos cada uno llegamos a la Habana dispuestos a conocer la otra cara de Cuba, la que pocos turistas descubren, la que todo un pueblo conoce, esa que no sabe dulce como la caña de azucar sino que es fuerte y deja resaca como el ron cubano.



Cita de: undefinedPara desayunar bajamos a la casa de la vecina de enfrente, que a través de un balcón enrejado que da a la calle vende yogures hechos por ella y pan con queso, un ingreso extra para su maltrecha economía familiar. Estamos alojados a dos calles del malecón y tenemos ganas de descubrir esa ventana al mar de la que tantas veces hemos oído hablar, así que con el queso y el yogur en la mano vamos a ver como las olas golpean contra los bloques de hormigón. Sobre la avenida principal un desfile de reliquias con ruedas nos dejan boquiabiertos a su paso. Chevrolet del 57, Ford del 58, Ladas rusos... todos ellos se pasean de un lado a otro con más parches que chulería, adornando a su paso el decadente escenario urbano y seguidos de una nube de humo negro que poco tiene que ver con el de los famosos cohíbas.
Caminamos por las calles de La Habana vieja y un cúmulo de sensaciones y sentimientos brotan en cada esquina, con cada negocio que descubrimos, con cada situación que nos toca vivir. A pesar de ser Navidad en la Habana no hay ni un solo luminoso, ni escaparates mostrando productos, ni publicidad de ningún tipo porque sencillamente no tienen nada que anunciar, salvo el triunfo de la revolución y el orgullo de su victoria. Seguimos explorando los rincones de esta ciudad por la que soplan aires de nostalgia y una seductora decadencia que personalmente me encanta, probablemente porque para un fotógrafo las calles de La Habana son lo que las olas de Hawai para un surfista. Las expresiones de los rostros son todo un mundo, los edificios coloniales maltrechos y deteriorados un buen resumen, la colección de coches antiguos una maravilla. Inventos cubanos a doquier, carteles y proclamas de la revolución, profesiones y objetos que dábamos por extinguidos... un bombardeo de estímulos con cada paso. [Fragmento del libro: De Alaska a la Patagonia en elefante   www.librosqr.com]









No tenemos un gran presupuesto y Cuba hasta ahora el país más caro de los que hemos visitado, más incluso que USA y es que Cuba para un turista puede llegar a ser muy caro. Sin embargo la realidad que queremos conocer no es la de dos turistas con dinero, sino la de un pueblo que vive con 12 dolares al mes por persona, que no tiene escaparates navideños y probablemente tampoco tendrá leche para desayunar a la mañana siguiente porque se ha acabado en toda la ciudad. Son semanas en las que nos movemos de una ciudad a otra de la isla en todo tipo de transportes, en autostop a pesar de que está prohibido, en camiones, en coches de caballos y siempre con la ayuda de un personaje muy curioso: El Amarillo. Este persona que viste de amarillo y esta a la salida de cada ciudad tiene el trabajo de rellenar todos los vehículos estatales que salgan de la ciudad con los pasajeros que le han pedido la vez, y de esta forma nos saltamos las prohibiciones del gobierno para que los extranjeros viajen en los transportes de los cubanos. A veces estamos una hora esperando, en otras ocasiones un día entero, pero la convivencia con sus gentes hace de esta forma de transporte todo una experiencia, dura pero enriquecedora.



Viajamos de la Habana a Matanzas donde celebramos el Fin de Año, luego seguimos a Cienfuegos, Trinidad y Topes de Collantes. Regresamos por la costa de playa Larga y playa Girón y finalmente visitamos el espectacular valle de Viñales y sus curiosas formaciones karsticas. Un mes en Cuba que ha sido de los más duros del viaje, un mes luchando para que no nos viesen como turistas o como un dolar con patas, durmiendo en casas "no oficiales" y abandonándolas temprano antes de que pudiera llegar el control de la policía, viajando en todo tipo de transportes, comiendo en restaurantes cubanos que nos han provocado unas cuantas gastritis... un país que además de dolores de estómago nos ha provocado un gran shock cultural, pero del que nos llevamos un buen recuerdo.



Cita de: undefinedYa estamos de vuelta en el avión camino de Cancún. Llevamos dos cajas de puros Cohibas para nuestro contacto y otra más para nosotros que queremos revenderlos y sacarnos un dinerillo. La azafata anuncia los productos que tienen de duty free y tras ellos las normativas que prohíben entrar a México con más de 25 cigarros cubanos por persona.

- ¡Oh, no! las cajas  tienen 25 cigarros cada una, en total llevamos 75 puros

Claro, al comprarlos nos dijeron muy astutamente que podíamos salir de Cuba con todos los puros que quisiéramos, pero otra cosa es los que podemos entrar al país de destino. Nos ha costado 25$ la caja y una vez en el avión, no la vamos a tirar...

Llegamos a Cancún y al pasar por la aduana hay un arco metálico donde te hacen pulsar un botón. Si sale verde pasas, si sale rojo te revisan. Noe va delante, pulsa y le sale verde, perfecto. Yo le sigo, pulso y...rojo, ¡maldición! Me llevan a una mesa y de pie me hacen abrir la mochila. Sacan una caja de puros y cuentan que hay 25. Siguen buscando y encuentran una segunda caja de Cohibas. La abren y...está vacía.

- Sabe que solo se puede entrar 25 puros por persona, ¿no?
- Si, claro. Esta caja me la llevo sólo de recuerdo.
- ¿Está seguro de que no lleva más puros en la mochila?
- No, no, claro que no...
- Bueno, puede seguir.

¡Ufff! En la mochila no, pero en la cintura y los bolsillos de los pantalones llevo todo un arsenal, si estuviésemos en Irak no me atrevería a llevar tantos puros adosados al cuerpo.
[Fragmento del libro: De Alaska a la Patagonia en elefante   www.librosqr.com]


[Continuare con el relato que dos años y 16 países dan para mucho... Próximo País Belice y Guatemala
De momento quien le interese el viaje o la literatura de viajes hemos escrito un libro que se titula: De Alaska a la Patagonia en elefante]
www.unmillondeelefantes.com
Guiando un viaje

Trencalòs

Uau!!!! ......  :o :o :o :o  De Alaska a Patagonia .... uf! .. pedazo viaje!  .ereselmejor .ereselmejor

Argibay

Septiembre 17, 2015, 18:27:33 pm #2 Ultima modificación: Septiembre 17, 2015, 18:29:55 pm por argibay
Eso si que es un viaje. .baba Y algún amigo se sorprende cuando nos vamos a Francia 20 dias...

Josse

Si Sr., eso es un viaje, lo demás son escapaditas, incluso la mia cuando hice Barcelona/Islandia....


sanmarti

A ese hilo si que me apunto!! Mas fotos mas anéctodas por fa  :o  :o  :o

Que hicisteis con la GMC? Venderla en Mexico? Algun problema con los visados en EE.UU por tema tiempo?

Hicisteis Bolivia tambien? Con que coche? Atacama?

jacklasser

 .ereselmejor .ereselmejor .ereselmejor Mis mayores respetos!!! Me quedo por aqui!! sin palabras...muchas gracias por compartir el viaje, saludos
VIVIENDO UN SUEÑO....... CARPE DIEM
MATEO 6:3

Bizkor

Yo también me quedo por aquí, que pasada de viaje¡¡¡ .baba .baba .baba

tomatasso


Alboka


txurtxil


wagen

Pillo sitio, butacas centrales, palomitas y refresco.  .palmas

hicidro

ufff.... NO sigo este hilo, puede ser perjudicial para mi salud  .loco1

tasfex


CAMPERVOY

Ocon,
        Hacía tiempo que no sabíamos nada de vosotros. Recuerdo que os pregunté por la furgo cuando estábais en USA todavía, pero ya la teníais vendida.
        Me da mucha envidia (sana) vuestra experiencia, no me pierdo vuestro libro, seguro que merece la pena.
Un abrazo!
Anton