Centro y Norte de Inglaterra con niños (32d). Jul-2013 ***AÑADIDO AL ÍNDICE***

Iniciado por mog mog, Agosto 10, 2013, 16:58:25 pm

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mog mog


CENTRO Y NORTE DE INGLATERRA Julio 2013 con niños y con autocaravana





Como complemento al viaje que hicimos el año pasado por el sur de Inglaterra (http://www.furgovw.org/index.php?topic=267201.0) (y aprovechando que aún tenía validez el pase de English Heritage, que nos daba entradas gratis a un montón de monumentos históricos y descuentos en otros), hemos vuelto a Inglaterra y hemos vuelto a escribir un diario.

Aquí lo dejo por si a alguien le puede venir bien.

Sábado, 6 de julio.
Km 83.473. Después de una semana de preparaciones, con compra de comida, selección de ropa y finalización de trabajo, y después de una mañana de remate de dichas preparaciones, incluido corte de pelo familiar, iniciamos la marcha, coincidiendo con la primera ola de calor del verano.
El trayecto por la A23 transcurre plácido, sin demasiado tráfico, y de un tirón hasta Huesca donde paramos a cenar.
Tras la cena, un poco más de trayecto, cruzando el puerto de Monrepós y sus obras, que ya no podemos admirar por haber ya oscurecido, y paramos a dormir, por consenso, en el aparcamiento-área recreativa que hay a la entrada de Villanúa, a 7 km de la entrada del túnel de Somport.

Domingo 7 de julio.
Km 83.933. Nos vamos despertando en medio de un paisaje pirenaico, con las últimas nieves aún resisitiendo en las partes más altas de las montañas. Atravesamos el túnel de Somport (desde el km 83.942 hasta el 83.950) y salimos ya en Francia. Hoy toca carretera todo el día, empezando por las sinuosas pirenaicas, pasando por algunas carreteras nacionales y llegando a las autopistas (de peaje la mayoría). Hacemos las paradas pertinentes para comer y cenar y, tras bordear Rouen, paramos a dormir a 180 km de Calais, primera etapa significativa del viaje.

Lunes, 8 de julio.
Km 84.913. Nos despertamos con ganas ya de llegar a Calais, coger el ferry y cambiar de tercio. A las reiteradas preguntas de "¿estamos ya en Inglaterra?" la respuesta es siempre la misma: "¿hemos cogido ya el barco?". Por fin llegamos a Calais, y tras llenar de gasoil el depósito en un Carrefour, llegamos al puerto y compramos los billetes, de ida y vuelta, en el momento por 184 €. Puerto de Calais: km 85.100.
Aprovechamos el trayecto en ferry para comer mientras pensamos cómo organizar la tarde (¿volvemos al castillo de Dover?). Mientras el barco se mece por las olas y el vientecillo (fresco, ya nos hemos puesto las sudaderas), yo voy actualizando el diario de viaje, los niños juegan con el i-pad y mi mujer se toma un te, para ir habituándose a las costumbres inglesas.


"Carrera" de barcos en el Canal de la Mancha... por ahora gana el pequeñín

Llegamos al puerto de Dover y, tras cambiar el chip de la conducción y de la hora menos y de los pagos en libras y de las distancias en millas, etc, nos dirigimos al castillo de Dover, que, aunque ya habíamos visto, mi hijo quería volver a ver, y nos viene bien para recoger la guía de este año de English Heritage.
La visita es breve (porque ya lo habíamos visto) pero aprovechamos una explanada de césped resguardada del viento (que sigue siendo frío) para tumbarnos un rato y que los niños corran.
Después de la merienda nos vamos ya al camping más cercano que es el ya conocido de Martin Mill, y nos dedicamos a las tareas propias de la estancia en camping (cambio de aguas, duchas, repaso del ordenador, fotos, etc) mientras los niños juegan en su explanada de césped, a la que asoman, cuando no hay niños cerca, un montón de conejos.

Martes, 9 de julio.
Km 85.114. Salimos del camping en dirección a Reculver y empezamos nuestro particular periplo buscando dónde aparcar la Mary (nuestra autocaravana). El aparcamiento de Reculver está capado a 2 metros y no hay otro lugar en las cercanías que no sea "private-no parking", así que pensando que ya no podríamos ver nada nos vamos hacia el oeste. A unos 2 km encontramos la indicación de un free parking.... también de altura limitada, pero seguimos calle adelante buscando donde dar la vuelta ... y al final de la calle aparece una explanada de aparcamiento sin restricciones, ni de uso ni de altura, y aparcamos. Desde allí tenemos no llega a dos km por el Saxon Shore Path hasta Reculver, junto al mar y lo seguimos acompañados de una pertinaz y fresca brisa.


Camino de Reculver con sus torres al fondo

Visitamos las torres y el "site" del asentamiento romano y comenzamos el camino de vuelta, mientras los niños van jugando y en su mundo.
De nuevo en la AC nos dirigimos a Rochester.... y de nuevo no encontramos ningún sitio donde aparcar la Mary. Nos metemos en un aparcamiento de un centro comercial, pero unos carteles dejan muy claro que es propiedad privada, que no se puede estar más de cuatro horas, que no se puede rebasar el espacio de las plazas pintadas y que no se puede aparcar y abandonar el sitio bajo amenaza de multa. Salimos pitando de allí e intentamos buscar otra alternativa de aparcamiento... sin encontrarla.
Así que pasamos de Rochester y vamos a buscar el castillo de Upnor, de English Heritage, en el que hay aparcamiento gratuito..... pero con plazas de tamaño turismo y "no caravans". Salimos de ahí y, por suerte hay un pequeño lay-by en el que cabemos, así que ahí paramos y comemos, ya algo tarde. Después tras recorrer la High Street, llegamos al castillo y lo vemos. Hay algunos detalles para niños que hacen que los nuestros lo disfruten más (los cañones para probar puntería y los disfraces de época). A la vuelta compramos un libro de segunda mano de chistes en inglés y volvemos a la Mary a merendar. Llamamos a un Brit Stops para confirmar que podemos pernoctar allí, y tras decirnos que sí, nos dirigimos hacia él tras pasar los atascos de Dartford Crossing y de las carreteras a continuación.
El Brit Stops en Battlebridge es un grupo de tiendas de antigüedades junto a un río, que ya están cerradas cuando llegamos a las 18:30, con una explanada de aparcamiento en la que ya hay otra AC. Aparcamos a su lado y, tras los deberes y la cena, nos disponemos a pasar la noche un poco preocupados por la salud de mi hija, que ha empezado a quejarse de la garganta y a estornudar.

Miércoles, 10 de julio.
Km 85.298. Salimos del Brit Stop y nos dirigimos al palacio de Audley End, haciendo una parada en un Tesco para comprar.
Después nos dirigimos directamente a Audley End House (English Heritage), donde pasaremos todo el día, accediendo sin mayor problema, después del susto inicial (puente limitado a 3 T). Disfrutamos más de las explanadas de césped y de la zona de niños que de la mansión en sí, aunque los niños soportan bien la visita guiada a la misma, pero donde haya unos patos a los que darle de comer trozos de pan, que se quiten todas las mansiones inglesas...


El "chaletito" de Audley End fue en tiempos la construcción más grande de Inglaterra; el rey en su momento dijo que era "demasiado para un rey pero que podría estar bien para su tesorero", el cual parece que "sisaba" lo que podía de las arcas reales

Ya por la tarde nos dirigimos al cámping de Cambridge, del Camping and Caravanning Club, donde nos hacemos socios temporales por la módica cantidad de 22 libras y donde haremos noche.

Jueves, 11 de julio.
Km 85.414. Salimos del cámping tras las dos horas de rigor de preparativos, entre los que se incluyen los vaciados y llenados del depósito. Hay un P+R cerca del camping en el que admiten autocaravanas, pero al llegar.... hay un cartel de altura limitada a 2'10 m. Tras los tacos de rigor, volvemos al camping para preguntar dónde podemos dejar la AC y nos dicen que en ese P+R, peeeeeero entrando por la segunda entrada, que no tiene límite de altura. ¡Acabáramos!. Por lo menos es gratis, aunque tenemos que abandonarlo antes de las 18:20, para evitar problemas con el overnighting, supongo.
Cogemos el bús, aún con el cielo cubierto y el aire fresco; luego cambiará el tiempo a mejor, pero la primera parada es en el mercadillo de Market Hill, para comprar un fular para el cuello, para evitar resfriados. Antes hemos entrado en un par de tiendas de telefonía para resolver el tema de la conexión a Internet. Hemos comprado un módem con SIM para datos y esta tarde lo probaremos.
Tras la pertinente visita a la oficina de turismo, donde los mapitas son por supuesto de pago, iniciamos la visita a Cambridge y sus colleges (sólo por fuera, por el precio de sus entradas), sus puentes sobre el Cam, y sus explanadas de césped de los Backs, donde no está muy claro si el acceso es libre o sólo para miembros. Acabamos la visita en el Jesus Green, donde comemos y sesteamos bajo un sol de justicia.


Los barcos en el río Cam (tardé en darme cuenta que Cambridge significa puente sobre el Cam; ¡qué simples son estos ingleses!)

Después nos tomamos los primeros "99 with flake" del viaje mientras acabamos el paseo por Cambridge y volvemos al autobús que nos llevará de vuelta al P+R de Trumpington.


Los "99 with flake" son los helados de la foto, de nata con una barrita de chocolate de Cadbury (el flake). Todo grasa directamente en vena, pero están muy buenos.

Emprendemos camino por las bastante saturadas autopistas inglesas en dirección al Brit Stop donde haremos la noche. Al llegar, tras contactar con el dueño para confirmar que no hay problema, le doy un golpe al parachoques, que ya estaba "tocado" desde el viaje a Berlín de hace dos años, y se acaba de romper. Lo sujeto como puedo para que acabe el viaje, con pegamento caducado, cinta aislante que se acaba y cello del estuche de los niños y creo que aguantará hasta que volvamos.
Después cena y probamos la conexión a Internet, que "milagrosamente" funciona a la primera, por lo que mandamos unos correos a la "family".

Viernes, 12 de julio.
Km 85.491. Arrancamos el día comprando en la Farm Shop del Brit Stops, delicatessen bio y orgánicas, algo caras, pero menos que dormir en un camping. Luego nos dirigimos a Bury St Edmunds, donde tienen unas plazas reservadas a autocaravanas, de pago como todas, pero por lo menos aparcamos sin problemas. De la ciudad lo más destacable es el parque de la abadía, con las ruinas de la misma, sus rosales, sus ardillas y sus gallinas sueltas (sí, sí, gallinas como las de corral).


Ardilla en Bury St.Edmunds ...a las gallinas no les hice foto

Después de ver la catedral (con folleto de actividades para niños incluido) y alguna que otra cosita, volvemos, a petición de los niños, al parque, con columpios, donde aprovecharemos el sol para descansar un poco y para comer, antes de dirigirnos a Lavenham.
Cuando conseguimos despegar a los niños de los columpios, después de comer, vamos a ver Lavenham, un pueblo muy pequeñito con muchas casas típicas de entramado.


Típicas casa de entramado en Lavenham, muy frecuentes en Inglaterra (y en otros lugares de Europa central)

Aparcamos en un gran aparcamiento a la salida del pueblo con la duda de si nos pondrán pegas (no caravans, no vans over 1.5T, no overwhelming bay limits), pero como está medio vacío, lo dejamos en un discreto rincón del aparcamiento y damos una vuelta por el pueblecito. Visto éste, dudamos si ir a un camping o a un Brit Stop cercano, donde pone que se puede cargar agua, y nos dirigimos allá aunque aún sea pronto. Es un pub con un beer garden detrás donde además del Brit Stop también hacen de minicamping para The Camping & Caravanning Club (The Six Bells, Preston St. Mary).
Lo que queda de tarde lo pasamos jugando al badmington y con las duchas y despues de cenar nos tomamos una cerveza y un te, que nos hacen adrede, porque no lo tienen de normal en el pub, y luego a dormir.

Sábado, 13 de julio.
Km. 85.528. Hoy ha tocado más horas de coche de lo deseable, en parte porque nos hemos despistado un par de veces con las carreteras, en parte porque éstas son estrechas, pasan por mucho pueblos con límite a 30 mph, y en general tienen bastante tráfico. Desde el Brit Stop hemos ido directamente al castillo de Framlingham, donde hemos aparcado gratis en su aparcamiento (sin restricciones de altura ni plazas pintadas) por ser miembros de English Heritage. Hemos visitado el castillo, que no vale la pena un viaje adrede pero, si se está cerca está bien verlo (eso sí, si no pagas la entrada por ser miembro de English Heritage).


Castillo de Framlingham... o de Fraguelrock para nosotros (broma privada)

Después nuestra intención es ver Norwich, pero se nos ponen en contra los elementos: primero no cogemos la carretera adecuada y nos toca hacer más kilómetros de los previstos, y cuando llegamos, después de haber comido en un parking junto a la carretera, el P+R que admite autocaravanas (Costessey), no funciona el fin de semana, así que desisitimos y nos vamos a buscar un camping donde descansar, que el día se nos ha hecho un poco pesado aunque no hayamos visitado casi nada. Aprovechamos que pasamos por un Sainsbury para poner gasolina algo menos cara que lo que suele haber (1.369 frente a 1.4 libras/litro) y a comprar alguna cosa que falta para comer antes de ir al Camping de C&C Club.

Domingo, 14 de julio.
Km. 85.697. Salimos del camping en dirección a ls Grimes Graves, unas curiosas minas de sílex prehistóricas. Realmente no hay mucho que ver, salvo un paisaje de curiosos socavones, ya cubiertos de césped, y descender a uno de ellos, que ha sido excavado, por una escalera de barco, con casco incluido (safety first).


En el fondo del pozo de las minas de Grimes Graves

Además prestan a los niños un equipo de exploración de la naturaleza, con prismáticos incluidos, que les hace más amena la visita.
Estas minas, de English Heritage, están en el bosque de Thetford, y aprovechamos para dar un paseo por el mismo, del que nos llevamos de recuerdo un par de dolorosas picaduras de insecto cuya inflamación nos durará varios días después. Hemos parado en el aprcamiento del Lynford's Stag, gratis, sin límite de altura y con mesitas para hacer picnic, por lo que aprovechamos para comer ahí mismo.
Después de comer, aún nos da tiempo a acercarnos a la ciudad de Ely, para ver su catedral. Cuando vamos a entrar está a punto de empezar la misa, por lo que apenas nos da tiempo a dar un rápido vistazo al "octógono" del crucero y a refugiarnos en la Cathedral's Shop, donde estamos un buen rato curioseando entre las múltiples cosas que tienen para vender (y acabamos comprando un libro). ¿Cómo era aquel pasaje bíblico del mercado en el templo?.


Catedral de Ely

Abandonamos el East Anglia para dirigirnos claramente hacia las Midlands, con un trayecto de coche que a los niños se les hace largo. Nuestro objetivo es un Brit Stop cerca de la ciudad de Lincoln, al que hemos llamado previamente para confirmar que podíamos ir y hemos deducido que sí, aunque no le hemos entendido mucho al interlocutor. El sitio en cuestión es el pub "Coach and Horses" en Billinghay, que tiene una gran explanada de césped (y restos de vacas) en la parte posterior y en el que nos tomamos una cerveza tras la cena y jugamos una partida de billar, invitados por el "landlord" del pub, un tipo con cara de inglés que resultó, francamente amable.

Lunes, 16 de julio.
Km. 85.944. Empezamos el día visitando la ciudad de Lincoln, aparcando en el aparcamiento de The Lawn, de pago, pero sin limitación de altura, eso sí, buscando una de las pocas plazas, en las que podemos no sobresalir demasiado para evitar problemas. Visitamos la ciudad, con su catedral (por fuera y con andamios), su castillo (por fuera y con muchos andamios), su palacio del obispo (por fuera porque el lunes sólo lo abren para visitas escolares, de English Heritage) y su Steep Hill y otras callejas.


Catedral de Lincoln

Aunque donde más tiempo estamos es en una tienda de segunda mano con fines benéficos donde compramos un lote de cuatro libros y otro de cuatro prendas de vestir para los niños al módico precio de 1'99 £ cada lote.
Comemos en el parque de The Lawn, con columpios y mesas de picnic y luego nos dirigimos al castillo de Bolsover (de English Heritage), en el que hacemos su visita autoguiada con audioguía (sólo en inglés).
Después vamos ya al camping de Teversal, cuya ubicación hemos tenido que localizar en Internet porque no aparecía en el mapa) y aprovechamos sus columpios, sus duchas y el que nos obliguen a pagar parcela con electricidad para recargar todos los dispositivos eléctricos que llevamos.

Martes, 16 de julio.
Km. 86.067. Esta mañana se nos han pegado un poco las sábanas y nos hemos levantado una hora hora más tarde de lo habitual, pero no pasa nada porque el día se va a limitar a visitar un complejo turístico al borde del Peak District, con subida en teleférico, visita a un par de cuevas y algunos columpios para los niños (The Heights of Abraham). Así que tras cargar y vaciar depósitos nos dirigimos hacia allí, que tampoco está lejos. En el aparcamiento hay zona sin plazas marcadas, así que tras pagar la correspondiente estancia para todo el día y comprar el billete familiar (2 adultos más 2 niños), cogemos el teleférico para subir. Pasamos el día tranquilamente, alternando entre los columpios, las visitas guiadas a las cuevas y las vistas del paisaje, que sin ser espectaculares, y dado que en Inglaterra no hay montañas significativas, resultan algo más "agrestes" que las típicas colinas verdes con vacas.


Teleférico de subida a The Heights of Abraham (cualquier teleférico de Picos de Europa, por no hablar de los Alpes, le da mil patadas, pero como en England no hay montañas significativas....)

Tras pasar el día arriba (hasta las 17:00, que es el último teleférico de bajada), vamos a un Brit Stop cercano a hacer la noche, y tras alguna vuelta de más, lo encontramos en mitad de (ahora sí) un típico paisaje inglés de colinas verdes y vacas pastando con un bosquecillo al fondo.


La autocaravana en el Brit Stop

Como aún es pronto, hacemos deberes, leemos un poco y decidimos la jornada de mañana, buscando algo de información en Internet.

Miércoles, 17 de julio.
Km. 86.110. Después de comprar pan en el Brit Stop, nos vamos directamente a Castleton, donde aparcamos en su aparcamiento de pago y me acerco a la oficina de información a comprar un folleto sobre posibles rutas a hacer. Optamos por una combinación de dos rutas resultando una duración intermedia, y menos mal que no optamos por una larga, porque mi hija no está muy por la labor. Aún así, la ruta resulta interesante, subiendo por el desfiladero y bajando por el prado, viendo desde arriba vistas generales del Peak District y su Mom Tor.


Ovejas, pastos y cercas de piedra en seco en la excursión por el Peak district. Dicen que es el segundo parque nacional más visitado del mundo (después del Monte Fuji de Japón). La justificación es que está entre las grandes conurbaciones de Manchester, Leed y Sheffield y por tanto millones de personas lo tienen a tiro de piedra.

Sigue haciendo mucho calor y también lo acusamos en la excursión , de modo que al volver toca hacernos un "99 with flake" para reponer fuerzas.
Después coche y autopista hasta York, cerca del cual localizamos un cámping-granja, algo cutre, pero limpio, donde jugamos al frisbee, hacemos deberes y celebramos mi cumpleaños.

Jueves, 18 de julio.
Km. 86.269. Después de cargar y descargar aguas vamos al P+R del Designer Outlet de York y cogemos el autobús para la ciudad. Visitamos la Cliffords Tower, las callejas, la catedral, las murallas, el museo del ferrocarril (gratuito, por cierto) y se nos hace la hora de comer. No habíamos cogido comida para comer cualquier cosa, y aquí empieza una pequeña odisea buscando "cualquier cosa" (nunca hay una hamburguesería a mano cuando la necesitas). Cuando por fin compramos algo nos vamos a un parque y comemos y sesteamos un poco sobre el césped. Ya comidos y sesteados, cogemos el autobús de vuelta al P+R, gratuito y sin barreras de altura, damos una vuelta por las tiendas del outlet, aunque no compramos nada, y luego seguimos nuestro viaje hacia la costa este. Ponemos algo de gasoil (muy caro por estar en medio de ninguna parte) y llegamos al Brit Stop, donde haremos la noche.

Viernes, 19 de julio.
Km. 86.340. Entre que nos levantamos un poco más tarde que de costumbre y que toca hacer compra (en un Morrisons, donde de paso ponemos gasoil), se nos hacen las 11:30 y aún no henos ido a ninguna parte, así que decidimos no ir a Scarborough e ir directamente a Whitby. Por el camino, por momentos, hay una espesa niebla, que contrasta con el sol inmisericorde que hemos tenido hasta ahora. No sabemos si achacarlo a la cercanía al Mar del Norte o a que va a cambiar el tiempo. El caso es que esta niebla le da un aire especial a las ruinas de la Whitby Abbey, pero nos alegramos de que después escampe y vuelva a salir el sol.


Ruinas de Whitby Abbey entre la niebla

Tras visitar la abadía, comemos en el mismo aparcamiento (que tiene barrera para limitar la altura, pero está retirada) y luego nos vamos a dar una vuelta por el pueblo, que pese a ser muy turístico, tiene su atractivo.


Pueblo de Whitby, al que en principio no pensábamos bajar (la abadía está arriba) pero que después resultó ser un digno de un agradable paseo.

Aprovechamos para comprar un diccionario de inglés con sinónimos y antónimos Collins, por 3'99 libras. Es curioso lo relativamente baratos que están los libros comparados con el coste general de la vida (y no sólo en las frecuentes tiendas de libros en oferta que hay).
Después de visitar el pueblo, atravesamos con la AC el parque nacional de North York Moors, curioso paisaje de páramos llenos de brezales y helechos, sin una sola sombra en kilómetros, alternados con barrancos más humbrosos y algo de bosque más hacia el sur.
Nos acercamos a Helmsley, cerca de donde haremos noche en un cámping que no permite jugar al balón y en el que las duchas cuestan 20 pennies, así que nos resulta más cómodo ducharnos en la AC, y no depender de que se acaben los 20 pennies a mitad de quitarse el jabón.

Sábado, 20 de julio.
Km. 86.477. Tras cargar y vaciar aguas salimos del camoing y vamos directos a la abadía de Rievaulx (English Heritage), situada en un vallecito, donde aparcamos gracias a que llegamos pronto.


Abadía de Rievaulx, una de las muchísimas que tienen en ruinas gracias a que Enrique VIII (el de las seis suegras) decidió quedarse y después vender gran parte de los bienes de la iglesia, cuando rompió con el Papa y decidió montarse su propio chiringuito, la iglesia de Inglaterra, cuyo"Papa" es el monarca inglés.

Cuando salimos el aparcamiento se ha llenado, y si hubiéramos llegado a esa hora no habríamos podido ni siquiera entrar. Después nos vamos a Richmond, donde también aparcamos por lo pelos, encajados en una plaza de coche que tiene un pequeño resalte posterior por lo que ni ocupamos dos plazas, ni ocupamos viales. Vistamos el castillo y comemos sobre el césped de su patio de armas. Subimos a la torre, no vemos a su fantasma pero sí el pequeño museo donde explican la historia del castillo. Después damos una pequeña vuelta por el pueblo y volvemos a la AC para dirigirnos al Brit Stop donde, previa llamada para confirmar, haremos noche. En el mismo (un resort con hotel, establos y otras actividades) damos una vuelta viendo los caballos y otros animales (alpacas, que no llamas) y luego nos retiramos a "nuestros aposentos" (es decir, a la AC).

Domingo, 21 de julio.
Km. 86.637. En principio hoy íbamos a ver Durham, pero mirando en guías ponía que la catedral está cerrada a turistas en Domingo y que los P+R funcionan de lunes a sábado, así que, ante las dudas cambiamos de plan y dedicamos todo el día al Beamish Living Museum, que aunque caro, vale la pena. De hecho llegamos antes de que abran (a las 10:00) y salimos cuando cierran (a las 17:00), habiendo visto las últimas zonas por los pelos.


Tranvías históricos funcionando en el museo viviente de Beamish; caro (como casi todo en Inglaterra) pero vale la pena

Después nos dirigimos a un camping cercano, cuyas indicaciones habíamos visto al ir al museo, y, aunque nos quedamos, es un caravan park, pensado para "statics", en el que las duchas son de pago (y además no puedes comprar tokens entre las 18:00 que cierra recepción y las 20:00 que abre el bar). Además la "clientela" es de los que se pasan todo el verano aquí, con lo que no es la más "agradable". Bueno, es sólo una noche.

Lunes, 22 de julio.
Km. 86.643. Nos está costando levantarnos un poco más cada día; se junta el cansancio acumulado y tal vez también el tiempo, que está siendo más húmedo, con el cielo encapotado aunque sin llegar a llover. Hoy hemos cogido los impermeables por primera vez en todo el viaje aunque finalmente no nos han hecho falta, e incluso a llegado a salir el sol a mediodía.
Tras la rutina de llenado y vaciado de aguas, vamos a Durham, que está cerca, y aparcamos en el P+R de Sniperley, que es gratuito y tiene incluso cinco plazas reservadas para autocaravanas.
Vamos a la ciudad en autobús y empezamos con un paseo por la orilla de enfrente del río para poder ver la fachada oeste de la catedral.


Fachada oeste de la catedral de Durham, desde el otro lado del río

Después, subimos a la misma y la recorremos entera, el claustro, el dormitorio de los monjes (actualmente biblioteca), la iglesia propiamente dicha, explicando a los niños qué son las naves, y el crucero y demás. Después subo yo solo a la torre con sus 325 peldaños, y con unas buenas vistas mientras el resto de la tropa me espera en un césped cercano.
A la bajada, callejeamos un poco, nos metemos en el mercado cubierto, compramos alguna cosilla y nos vamos a comer a un parque con columpios, en el que no llegamos a tiempo al carrito de los helados.
Después volvemos hacia el centro para comprar algo de comida y coger de nuevo el autobús al P+R. Son sólo las 16:00, pero decidimos ir ya al Brit Stop donde haremos noche. A pesar de tener nuevos dueños, nos permiren quedarnos y lo agradecemos tomándonos media pinta de cerveza, mientras los niños acaban de ver la película que iban viendo por el camino. Después, algo de deberes, cena y un poco de lectura/música/fotos/diario antes de acostarnos pronto, a ver si recuperamos el horario inglés.

Martes, 23 de julio.
Km. 86.682. Esta noche ha habido tormenta. Es la primera vez que llueve en todo el viaje, y aunque es mejor que llueva por la noche que por el día, el repiqueteo de las gotas en el techo de la AC, no nos deja dormir bien. Salimos pronto del Brit Stop y llegamos al castillo de Warkworth bastante antes de que abran a las 10:00. En cuanto abren lo visitamos y almorzamos dentro aunque el tiempo no sea de lo más agradable para almorzar al aire libre.


Esperando a que abran el castillo

Al acabar la visita, dudamos si ir a Alnwick o si ir directamente a un camping. Las cosas que más destacan en Alnwick (el castillo y los jardines), de propiedad privada, son bastante caras, así que decidimos ir al camping del C&C Club, desde el que se puede ir paseando a la playa y al castillo de Dunstanburgh. Nos instalamos en el camping, que es el primero con un "service point" para ACs decente, y en el que más se esfuerzan por ser amables (aunque siguen sin dejar a los niños jugar con el balón). El tiempo sigue gris aunque el encargado del camping nos dice que mejorará (y acierta). Comemos con tranquilidad, descansamos un rato y luego nos vamos de paseo a la playa, desde la que vemos el castillo de Dunstanburgh, y entendemos una vez más porqué vienen a nuestras playas.


Playas en el mar del Norte por el lado inglés

Estamos un rato jugando con la arena y volvemos al camping a por nuestra ración de duchas, que son gratis y con regulación independiente de temperatura y caudal.

Miércoles, 24 de julio.
Km. 86.753. Salimos del cámping tras el llenado y vaciado de aguas, después de otra noche en la que ha llovido, aunque ya no lo hace por la mañana. Vamos por la Coastal Road (carretera turística costera), pasando junto al castillo de Bamburgh, que dejaremos para otra ocasión, hasta la isla de Lindisfarme, que tiene la peculiaridad de que con la marea baja es accesible con el coche, y luego se "aisla" al subir la marea.


Acceso a Lindisfarne con la marea baja

Pendientes de a qué horas suben y bajan la marea, accedemos con la AC y aparcamos para dar un paseo por el pueblo, los restos de la abadía y por la zona de costa, inundada o no según las mareas, que es lo que nos resulta más interesante. Salimos prudentemente a las 13:00 (la hora límite eran las 14:15, antes de que subiera la marea) y paramos en una zona de picnic cercana junto a la carretera, donde comeremos. Después de jugar un poco al béisbol, seguimos camino habia Berwick-upon-Tweed, el punto más al norte de nuestro viaje de este año. El día se ha mantenido bien, incluso con algún rato de sol, pero según nos acercamos a Berwick, se va cerrando una espesa niebla, que hace del recorrido por las murallas de la ciudad un paseo especial.


Niebla en Berwick-upon-Tweed, ya junto a la "frontera" con Escocia y punto más al norte en nuestro viaje

Visitamos los museos militares de los antiguos barracones deprisa porque cierran a las 17:00, y a la salida la niebla se mantiene y es acompañada por una llovizna intermitente, que nos acompañará el resto del día. Después vamos a comprar y a repostar gasoil a un Tesco que hemos localizado a la entrada de Berwick y tras las compras nos vamos a un Brit Stop cercano, en una ubicación no especialmente agradable, pero suficiente para pasar la noche.

Jueves, 25 de julio.
Km. 86.833. Hoy nos hemos despertado muy pronto, lo que unido a que estábamos en Brit Stop, que no había que vaciar depósitos, y que teníamos coche antes de la primera parada turística y los niños podían desayunar por el camino, han hecho que a las 8:30 estuviéramos ya en marcha, bajo un espesa niebla y una lluvia que por momentos ha sido muy fuerte, creando verdaderos ríos por el lateral de las carreteras sin arcenes del interior de Inglaterra. Hoy tocaba Hadrian's Wall, y el primer destino ha sido las ruinas de la ciudad romana de Corbridge, que hemos podido ver ya con sol (gracias a la variabilidad del tiempo inglés; quién lo iba a decir al levantarnos esta mañana) y con cierta tranquilidad gracias a que había una actividad para los niños consistente en localizar ocho figuritas de romanos diseminadas por entre las ruinas, lo que ha hecho que las recorrieran enteras, para conseguir la recompensa. Una vez localizadas todas las figuritas, nos hemos desplazado al siguiente destino, el fuerte de Housestead, que es más significativo por el paisaje que se ve desde él que por las ruinas propiamente dichas, aunque tenga el retrete múltiple (24 seater) más antiguo que se conserva. Una vez visto nos vamos a comer a la zona de picnic del centro de visitantes de Hadrian's Wall, donde podemos aparcar más o menos bien (aunque pagando un ticket que nos vale para todos los aparcamientos de la zona).


Vista de un tramo de la muralla de Adriano, más interesante histórica y paisajísticamente que monumentalmente. Hay un recorrido marcado que sigue dicha muralla cruzando Inglaterra de lado a lado y es muy frecuentado (algo así como nuestro camino de Santiago, salvando las distancias)

Allí, los niños juegan por el césped, y cuando (los niños) se hartan de tanta ruina, decidimos ir ya a un cámping cercano (en Haltwhistler, de C&C Club, francamente recomendable), donde nos relajamos ya con las duchas, y donde los fuegos de la AC se ponen a dar por saco (ahora me enciendo, ahora me apago). El día se ha mantenido bien, hasta que al llegar al camping se ha puesto gris, se han oído truenos y se ha puesto a llover un poco. Luego se ha vuelto a despejar y no se si por la noche volverá a llover.

Viernes, 26 de julio.
Km. 86.990. Retomamos las buenas costumbres levantándonos pronto para que nos cunda el día. Tras la rutina de los depósitos salimos hacia Carlisle, pensando que la visita allá será rápida (visita al castillo de English Heritage y poco más).


A las puertas del castillo de Carlisle, apuntado por una ballesta

Pero la ciudad es agradable (se puede aparcar además al lado del castillo), hace muy buen tiempo y además hay una enorme explanada de césped junto al castillo y al aparcamiento que los niños quieren aprovechar para sacar partido al juego de béisbol de Lindisfarne, así que pactamos que después de ver castillo y catedral (que es bastante curiosa), comeremos pronto en la explanada. Y así lo hacemos, pero cuando se va acercando la hora de volver a la AC, los niños descubren un parque infantil cercano, que tiene además unos juegos de agua donde darse un chapuzón. Como el tiempo acompaña, ponemos más dinero en el parquímetro y estrenan los niños los bañadores. Después un heladito y volvemos a la AC para dirigirnos hacia Lake District.
De camino, paramos en el Stone Circle de Castlerigg, que está en un lugar muy bonito, rodeado de las montañas más altas de Inglaterra (aunque ninguna supere los 1.000 m).


Círculo de piedras entre "montañas"

Como aún tenemos tiempo antes de ir al Brit Stop, damos una vuelta por el Honister Pass, lo más parecido a paisajes de alta montaña que tienen por estos lares. El acceso está prohibido a caravanas por las fuertes pendientes de hasta el 25%. Además la carretera es muy estrecha, pero como no dice nada de autocaravanas nos metemos. La verdad es que las vistas son muy bonitas, pero en algunos puntos lo paso mal conduciendo, no se si lo repetiría con un AC (mucho mejor hacerlo en bici, o con una camper como alternativa menos ancha que la AC).


El Honister Pass, muy bonito .... para hacerlo en bici!

En un momento dado, al cruzarnos con otro coche, oímos un ruido de chapa, como si le hubiéramos golpeado a algo por los bajos o el lateral, pero no descubrimos ninguna señal del golpe!!!. Finalmente volvemos a carreteras más convencionales y llegamos al Brit Stop donde haremos noche.

Sábado, 27 de julio.
Km. 87.132. Salimos pronto del Brit Stops porque tenemos un rato de coche antees de parar a ver algo. Teníamos pensado ir al centro de Lake District atravesando Hard Knott Pass y Wrynose Pass, pero después de las dificultades de ayer, decidimos rodear la región por el oeste y entrar por el sur, por el extremo sur del lago de Windermere. Esto supone unos cuantos kilómetros de carreteras inglesas (ahora estrechas, ahora sin arcén, ahora viene uno de cara, ahora para que no cabemos, etc.).
Llegamos por fin al Stott Park Bobbin Mill, que pese a las reticencias iniciales de los niños, les resulta de lo más interesante el ver cómo fabricaban las bobinas de hilo a partir de un taco de madera (además hay acrividades específicas para ellos, junto con los ya frecuentes disfraces de época).
Después nos acercamos al Lake District Visitors Centers, con el objetivo de recoger información para hacer alguna excursión, y aquí llega la parte problemática del viaje. En el centro de visitantes hay una actividad (de pago) de lianas y tirolinas por las copas de los árboles y empieza la discusión, que si subimos todos, que si no subimos, que si hacemos el recorrido corto, que si el largo, que si paga en metálico, que si con tarjeta, que si ahora no podemos subir y que hay que esperar, que si es mucho tiempo, etc.


El Tree Top Trek

Finalmente se nos va la tarde por completo (aunque sí hacemos el recorrido por las copas de los árboles) y es hora de buscar un camping. Para colmo se pone a llover. Encontramos el aparcamiento de un hotel, una gran explanada de césped, con el cartel de "caravans welcome" en el que por 9£ nos dejan pasar la noche, aunque eso sí, nos advierten de que no hay ningún tipo de servicios. Nos vale para una noche.

Domingo, 28 de julio.
Km. 87.252. Ha estado lloviendo toda la noche y sigue lloviendo por la mañana, lo que nos ha impedido dormir bien y nos impide realizar la excursión prevista, así que decidimos emprender camino hacia el sur, hacia Chester, a donde llegamos a la hora de almorzar. El camino es una alternancia de sol y lluvia, y aunque parece que mejora al llegar a Chester, cogemos los impermeables por si acaso..... ¡y menos mal que los cogemos! La primera parte de la visita la hacemos con buen tiempo, pero según se acerca la hora de comer, empieza a chispear, luego a llover, luego a diluviar, con lo que toca volver corriendo a la AC para acabar comiendo dentro, después de cambiarnos de ropa (empapada pese a los chubasqueros). Durante la comida alterna el sol con el diluvio, cambiando de uno a otro, con lo que damos Chester por visto y seguimos camino.


El centro de Chester completamente lleno de turistas

Llegamos a un camping de C&C Club un poco peculiar: está en un sitio precioso, en lo alto de una colina con un lago en una vieja cantera, pero no tiene aseos. Como sí tiene un buen sitio para llenar y vaciar aguas, nos vale para pasar la noche, y además es más barato que los normales.

Lunes, 29 de julio.
Km. 87.515. Tras las rutinas habituales nos vamos directamente a Ironbridge, con una lluvia que irá apareciendo y desapareciendo a lo largo del dia. Estudiamos previamente el folleto con los precios y los diferentes museos que se pueden ver, pero al final decidimos centrarnos exclusivamente en el puente. Además aparcamos en el P+R gratuito (incluido el autobús), que así forma parte del encanto. Vemos el puente, patrimonio de la humanidad, con un tiempo variable, ahora sol, ahora lluvia, ahora nos comemos un helado ahora se pone a llover, y entre unas cosas y otras, se nos pasa toda la mañana.


El Ironbridge, el primer puente de acero que se hizo

Volvemos a la AC y decidimos dirigirnos a Stratford-upon-Avon, a cierta distancia. Por el caminos, al cruzar Birmingham por una red de autopistas bastante congestionada, nos cae una de las mayores tormentas que yo recuerde en la autocaravana, pero al llegar a Stratford, vuelve a brillar el sol (british weather). Intentamos aparcar en el P+R, pero a pesar de lo que pone en las guías y de lo que nos dice el autobusero al que preguntamos, el encargado no quiere levantarnos la barrera de límite de altura. Nos vamos pues al aparcamiento de Avonside, y como ya es tarde, el dinero que ponemos nos vale para aparcar hasta las 8:00 del día siguiente. Comemos (ya muy tarde son las 15:00) y damos una vuelta por Stratford, eso sí, sin entrar ni donde nació Shakespeare, ni donde vivió su madre, ni donde vivió su hija, ni donde vivió su mujer, ni en ningún otro sitio relacionado con él. Nos queda la duda de si el tal Shakespeare fue un hombre ilustre de las letras japonesas, por la cantidad de nipones que había allí, o si fue el inventor del capital-consumismo, por que todo el tinglado alrededor de Stratford está pensado en el "compra, compra, compra,...."
Aún así pasamos un rato agradable en uno de las múltiples superficies de césped que tienen por estos lares.
Al finalizar la visita nos entra la duda de si podremos pernoctar en el aparcamiento. No lo prohíbe expresamente, hay tarifas para 24, 48 e incluso 72 horas y tarifa especial entre 16:00 y 08:00, pero no habiendo a quien preguntar, preferimos ir a lo seguro e ir a uno de los dos Brit Stops cercanos. Además, aunque en teoría en el aparcamiento permiten coche y caravana, o específicamente camiones y autobuses, la zona de coches pone un límite de peso de 2T, aunque somos varias las ACs allí aparcadas que evidentemente sobrepasamos ese peso, con lo que si te quieren pillar, te pillan.

Martes, 30 de julio.
Km. 87.673. No tenemos cobertura en el modem y no podemos ver la web del castillo de Warwick, nuestro objetivo de hoy, así que nos dirigimos allí directamente sin saber exactamente qué nos vamos a encontrar. Lo que pensábamos que era un castillo más a visitar y luego veríamos la ciudad, es realidad un parque temático medieval, donde combinan el castillo propiamente dicho, con sus salas con armaduras y cuadros, con recreaciones de época medieval, y victoriana, con figuras de cera, con animaciones de cualquier época histórica inglesa (desde los vicious vikings hasta los viles victorians), con representaciones de torneos medievales y demás. Menos mal que con la membresía de English Heritage nos sale la entrada familiar a un precio razonable (38,40 £ + 6 de aparcamiento). El caso es que los niños lo disfrutan más que el típico castillo en ruinas de English Heritage y nos quedamos todo el día allí, eso sí, alternando la lluvia puñetera con el sol ardiente.


El castillo-parque temático de Warwick

Cuando salimos, nos dirigimos a otro Brit Stop cercano a nuestro objetivo de mañana, Wrest Park (de English Heritage), que resulta ser un restaurante, con un gran beer garden unos columpios para los niños e incluso un tren en miniatura para montar (aunque ya no funciona cuando llegamos porque es tardísimo: las 6 de la tarde). Eso sí, por lo menos ya no llueve y me tomo una cervecita (una pinta) mientras los niños juegan a representar justas medievales.

Miércoles, 31 de julio.
Km. 87.803. Salimos del Brit Stop y como estamos cerca de la visita y además está lloviendo, decidimos ir a hacer nuestra última compra en Inglaterra antes de hacer la visita turística, a ver si va escampando. Localizamos un Sainsbury en Luton, después de dar alguna que otra vuelta y compramos y ponemos un poco más de gasoil, para asegurarnos el tener suficiente para salir de la isla. Después, y ya sin lluvia, nos dirigimos a Wrest Park. Tras algunas dificultades para aparcar, hacemos la visita de la mansión y de los jardines, que es lo que realmente vale la pena, al principio con sol, luego nublado y finalmente con lluvia, con lo que acabamos la visita algo precipitadamente, corriendo bajo la lluvia hacia la salida, ya que no nos íbamos a quedar en el pabellón verde del juego de bolos hasta que volviera a salir el sol, no se sabe cuando.


Wrest Park ... bonito a pesar de la lluvia

De nuevo en la AC, nos ponemos en marcha para parar en un lay by cercano a comer, y después nos dirigimos ya al cámping de Londres, poniendo mucha atención al llegar a la M25 para no meternos en la LEZ.
Al llegar, antes de instalarmos, vaciamos aguas, lo cual se hace más fácil, o menos difícil, gracias a que otra AC instalada nos deja un depósito portátil, si no, dado que el tubo y la prolongación no son suficientes para alcanzar la rejilla, habría tenido que hacer innumerables viajes con la caja de los triángulos de emergencia, como el año pasado.
Después duchas, deberes, cena y celebración del cumpleaños de mi hija.

Jueves, 1 de agosto.
Km. 87.877. Como contraste con la lluvia de ayer, hoy el cielo está totalmente despejado y la previsión es de que va a hacer calor, así que no cojemos ni chubasqueros ni sudaderas. De hecho resulta ser el día más caluroso de los últimos 10 años. Esta circunstancia unida a la cantidad de gente que hay en todas partes (lo que supone interminables colas bajo el sol en los sitios a los que podríamos entrar, léase London Eye, por lo que no entramos) hace que el día resulte agotador. Empezamos, tras el paseo a la estación de Chorleywood y el viaje en tren, dando una vuelta por los alrededores del London Eye, saturados de turistas.


London Eye... no está torcida la foto, es que es así

Después intentamos llegar al HMS Belfast en barco, pero nos dicen que tenemos que esperar 50 minutos como mínimo, por lo que pasamos del barco y nos vamos en autobús.
Entramos 2x1 por ser miembros de English Heritage (los niños no pagan) y recorremos el barco entero, desde la sala de máquinas hasta el camarote del almirante, y resulta bastante interesante pese a no ser nosotros especialmente aficionados a los barcos.


El HMS Belfast, curioso ver un barco por dentro aunque el tema bélico no sea nuestro principal interés

Después, comemos ahí mismo, junto al río, viendo pasar toda la variada fauna de turistas y locales que llena Londres estos días.
Después de comer cogemos de nuevo el metro para ir hasta Greenwich (haciendo un transbordo en Canary Wharf) y paseamos desde el Cuty Sark (que además de un whisky es un barco) hasta el observatorio con su meridiano 0, de nuevo con bastantes turistas y bastante calor.


Greenwich y el skyline del Canary Wharf al fondo

Luego de nuevo al metro y de vuelta a Chorleywood, pasando de nuevo por Canary Wharf, coincidiendo con la hora de salida de cientos (mejor miles) de oficinistas de las grandes entidades financieras, esas que si la economía va bien ganan dinero, y si va mal también ganan dinero.
Paseito hasta el camping y mañana más.

Viernes, 2 de agosto.
Como contraste con el calor de ayer, hoy refresca algo e incluso hay nubes y llueve algo por la mañana, pero como hoy toca museos, da un poco igual el tiempo. Empezamos por el museo de Historia Natural, en el que damos una vuelta por encima, completando algunas salas que no vimos el año pasado y repitiendo otras. Uno de los motivos de estar en Londres es que el año pasado a los niños les supo a poco las visitas a los museos y les prometimos que volveríamos. Esto (y aprovechar que aún nos vale la tarjeta de English Heritage) es la causa de nuestro segundo viaje seguido a Inglaterra (si no, habríamos variado de destino antes que volver de nuevo a Inglaterra).
A la hora de comer, salimos del primer museo, comemos con un músico callejero de fondo y luego entramos en la sala de Hands On, del Museo de la Ciencia, donde nos encontrará mi mujer unas horas después tras su visita al cercano Harrods. Después un rato más de museo y un paso por la tienda del mismo, antes de volver al metro y al camping.

Sábado, 3 de agosto.
Hoy hemos tenido uno de los días más largos y pesados del viaje. Empezamos saliendo del camping, sin poder vaciar ni llenar por lo incómodo de lo mismo. Ya lo haremos en Canterbury. Aparcamos en el aparcamiento del golf de Chorleywood, gratuito, pero prohibido de lunes a viernes de 8:00 a 8:30, para evitar que se convierta en un aparcamiento para los que van a trabajar a Londres y cogemos el metro. Después de un poco de desconcierto, nos enteramos de que por trabajos de mantenimiento de las vías, no hay tren entre una serie de estaciones aunque habrá transbordo gratuito en autobús. El transbordo en bus funciona bien, pero tarda mucha más que el metro, por lo que llegamos al mercado de Portobello Road, bastante tarde. Aún así, está llenísimo de gente, especialmente españoles e italianos, japoneses muy, muy pocos.


Autobuses y furgos en un puesto del Portobello Road Market

Damos una vuelta entre la multitud, viendo la variedad de puestos, aunque no compramos nada, y después, tras utilizar los servicios de un McDonalds cercano, damos una vuelta por Notting Hill, ya mucho más tranquila y con mucha menos gente. Después, seguimos paseando hacia Kensington Gardens, pasando por la calle privada con las residencias de los embajadores (photos prohibited).
Comemos en el césped y después cogemos un "rojo autobús" para llegar a Oxford Circus, desde donde bajamos por Regent Street, hasta la tienda de juguetes Hamley's y sus siete plantas. La verdad es que nos decepciona un poco (ni hay mucho más de lo que pueda haber en un Toys'r Us y más caro), pero aún así compramos los regalos de fin de viaje para los niños, intentando agotar las últimas libras. Aún nos queda alguna para comprar algo para merendar y luego la serie de metro, transbordo, bús y más metro hasta Chorleywood, donde nos espera la AC.
Tenemos un rato de autopista para ir al área de ACs de Canterbury, pero resulta ser una mala idea. Cuando llegamos el área está llena y ni siquiera se levanta la barrera para poder vaciar y cargar agua (son más de las 20:30), así que volvemos a la carretera y paramos en un lay-by para camiones para cenar. Dudamos entre quedarnos ahí mismo a hacer noche o llegar hasta el ya cercano Dover y ver si podemos cruzar esta misma noche, aunque nuestra resefa sea para mañana a las 12:15. Llegamos a Dover y, pese a que las oficinas están cerradas, vamos al check-in del puerto. Allí nos reenvían a otras oficinas donde preguntamos si podemos cruzar esta misma noche. Tras un rato mirando el ordenador, nos dicen que sí, pero que a Dunquerque, no a Calais, y con un sobreprecio de 69 €, así que tras meditarlo un poco decidimos que no, pero que nos reserve ya para el ferry anterior (con NFSD, nos permiten coger un ferry anterior o uno posterior al de tu reserva, sin sobrecoste, siempre que haya plaza). Ya casi a las 23:00 nos dirigimos al paseo marítimo donde según los foros de viajes se ouede oernoctar mientras esperas al ferry, pero, aunque hay varias ACs pernoctando, a la entrada hay un cartel de prohibido anchos superiores a 2 m, con lo que no nos arriesgamos y nos vamos a un aparcamiento cercano, gratuitonpor las noches y los domingos.
Por desgracia, también han elegido ese aparcamiento un par de coches con chavales de dieciocho, que deciden hacer algo de botellón antes de pasar ahí la noche, dejando al día siguiente la zona hecha una auténtica porquería. Aún así, podemos dormir razonablemente bien.

Domingo, 4 de agosto.
Km. 88.073. Tras desayunar nos vamos al barco y embarcamos en el ferry anterior al resevado (a pesar de que en teoría, la noche anterior nos habían cambiado la reserva, al llegar resulta que no, pero no hay problema en hacerlo en el acto porque el barco va medio vacío). Mientras esperamos para embarcar, hacemos el último uso del chip para conectarnos a Internet en Inglaterra y ya en el barco agotamos (ahora sí, las últimas libras en un desayuno inglés que nos sirve de comida y en unos bombones). Aunque no creo que los ingleses ingresen próximamente en el euro, tampoco creo que volvamos a corto plazo a Inglaterra, así qie no vale la pena guardar libras.
Al llegar a Francia, carga de gasoil a un precio razonable en el Carrefour de Calais y emprendemos viaje a Paris para llegar al Playmobil Fun Park, como última promesa a los niños. A pesar de la distancia y de que nos cuesta un poco encontrar el acceso al centro comercial donde está, llegamos todavía a una hora suficiente para que los niños disfruten un poco de él. Tras la compra de la figurita de rigor, reemprendemos el camino hacia el sur, parando en el área de ACs de Souppes-sur-Loing (5€ la noche, electricidad incluida, más otro euro para llenar depósitos), la misma que el año pasado, aunque para otro año localizamos el área de servicio del Jardin des Arbres, en la A77, unos kms más al sur (salida 18.1) que tiene también punto de servicio de ACs (o al menos pone el cartel a la entrada en la autopista).

Lunes, 5 de agosto.
Km. 88.469. Hoy toca coche y más coche. Autopista, peajes aunque intentemos evitar algunos cogiendo algún tramo de carretera nacional, el viaducto de Millau, más autopistas y más peajes, el cruce de la frontera Francia-España (km. 89.248) y a dormir casi llegando a Tarragona.

Martes 6 de julio.
Km. 89.451. Un último empujón y a casa a comer. Llegada a casa, km. 89.751.
¡Hasta la vista!

kookoo

California T5 Confortline 130 cv

mog mog

Cita de: kookoo en Septiembre 02, 2013, 17:35:06 pm
GRacias por tu crónica  .bien


De nada.

Realmente escribo los diarios para mí, para recordar mejor los viajes al cabo del tiempo, pero si además puede ayudar o entretener a alguien más... pues yo encantado.


Haritza

Muy chula la crónica. El año que viene tiraremos hacia allí. Empezamos a coger ideas. .palmas
Gracias por compartirla. ;)
Nuestro blog de viajes en furgo: www.furgobidaiak.eus

Nuestra furgo: NAUTILUS, el sueño de Julio verne:
http://www.furgovw.org/index.php?topic=289211.0

guadarrama

No ha cambiado mucho el panorama desde vuestro viaje, pero un de los mejores consejos es hacerse del English heritage si se piensa visitar algún castillo o similar!!
Gracias por la ayuda.