Alsacia, Paris y pueblos franceses (19d) Dic-2017 ***AÑADIDO AL INDICE***

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   Después de un pequeño parón en la crónica. sigo con ella.

   El día 11 le voy a omitir, ya que no tuvo mucha más historia que ir desde Estrasburgo a Paris, donde encontramos un buen aparcamiento gratuito y con estación de metro al lado. Desde ahí en 10 minutos y sin transbordo te plantabas en el centro. Además había en esa calle alguna furgo y autocaravana más aparcadas. El lugar exacto era Avenue Busteau. 94700 Maisons-Alfort. Muy recomendable.

   Día 12 y 13, A caminar y caminar por Paris. Como no llevábamos una ruta preparada (gran error para una gran ciudad) fuimos un poco improvisando, aprovechando también que los dos conocíamos Paris.

Así que el día 12 primero tiramos a lo básico (el gran eje), desde la Torre Eiffel (a la que subimos a patita) hasta el Louvre por jardines de Tuilerias, recorriéndolo a ratos con la peque en el carro y otras porteándola. y después ya de noche, aprovechamos para ver un poco los campos elyseos con toda la iluminación navideña. De ahí, metro y a dormir, con una paliza considerable de caminar y caminar.

El día 13 lo teníamos reservado para ir a Montmartre, ya que es nuestra zona preferida de Paris. Así que cogimos metro hasta Moulin rouge y de ahí pasando por el cementerio subimos hasta el Sagrado corazón, disfrutando del pintoresco barrio un 24 de Diciembre. El premio llegó en la misma puerta, donde un grupo de cantantes africanos nos dedicó una canción. Uno de los momentos emotivos del viaje. Desde ahí fuimos hasta Notre-dame, donde queríamos llegar a la misa del gallo, mientras íbamos comprando alguna cosilla para nuestra particular cena navideña. Cuando llegamos a Notre-Dame, estábamos exhaustos, así que decidimos abortar el plan tras ver la kilométrica cola que había para entrar. Buscamos una iglesia mas chiquitita para ver como vivían los parisinos esa tradición y de ahí fuimos a buscar la furgo con la que iríamos a cenar a los pies de la torre Eiffel, previo paso por la famosa chocolatería de Pierre Herme (una locura), en la que compraríamos unos macarons y algún postrecillo más.
Con la furgo nos acercamos hasta la Torre y ahí sacamos nuestra mantita para cumplir uno de esos sueños personales de adolescencia, cenar un 24 de Diciembre a los pies del gran monumento parisino.
Una vez disfrutamos de nuestra deliciosa cena, volvimos a la furgo, que nos sacaría ya de Paris, pasando por el gran arco de La Defense, con una escasez de tráfico que solo se puede disfrutar en esa señalada fecha.
Después de apartarnos unos kilómetros de la capital francesa, decidimos pasar la noche de Navidad al lado de un castillo en la localidad de Champlan, ya a eso de la 1 de la mañana.

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Día 14

Despertamos un poco tarde, debido a la trasnochada del día anterior. Así que iniciamos nuestra ruta unos cuantos km.separados de Paris y ya rumbo a casa, para atravesar el Valle del Loira. Allí marcado con un asterisco teníamos el castillo de Chambord. Imponente y majestuoso, nos sorprendió muy gratamente, ya que aunque habíamos visto fotos, no nos habían servido para imaginarle tal y como es. Después de un tranquilo paseo por los alrededores, ya que no estaba abierto por se la fecha que era, nos dirigimos a Montresor, para ver otro castillo (en esta zona los hay a patadas) con no tanto encanto.

Allí decidimos pernoctar esa noche.

Quiero resaltar lo curioso que nos resultó ver que el día 25 por la mañana (al contrario que en España) abren todas las panaderías y venden un pan riquísimo al que llaman pan de Navidad. Nosotros paramos a comprar en una pasado el mediodía y al ir a pagar la chica que nos atendió nos dijo que era un regalo de Noel con una amable sonrisa.

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Día 15

Después de dar un paseo por la zona de Montresor, cogimos la furgoneta para dirigirnos a Oradour-Sur-glane, después de atravesar el parque regional de la Brenne.

No teníamos el pueblo de Oradour marcado en ruta, pero un par de semanas antes del viaje, en una kdda furgonetera nos lo recomendaron, así que después de echar un ojo en google lo incluimos en el recorrido. Para quien no haya escuchado hablar del lugar, Oradour es un pueblo en el que los nazis hicieron una manzana en la Segunda Guerra Mundial. Desde entonces, nada se ha tocado del lugar y sirve como reconocimiento a las victimas y como recuerdo del dolor sufrido. El lugar te pone los pelos de punta. Es increíble notar el silencio y el ambiente entristecido que da una sensación de luto que aún se guarda después de tantas đecadas. Una visita que merece mucho mucho la pena.

Desde ahí partimos a Rosiers, una pequeñísima aldea con un especial encanto en la que dormimos en mitad de la plaza, con el beneplácito y la conversación del aguacil (o algo parecido), que nos invitó a visitar la Iglesia recientemente restaurada. El hecho de estar cerca de lugares mucho más turísticos, como Collognes la Rouge o Turenne, que eran los que teníamos apuntados, quizá sea la razón por la que la  gente que allí nos encontramos se sorprendiera de nuestra visita (sobre todo en esas fechas)y mostraran una hospitalidad que contrastaba bastante con el frío clima.

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  Día 16

  Despertamos en Rosiers y después de un paseo cortito fuimos hasta Collognes la rouge. Allí a parte de un precioso pueblo vacío(como muchos a estas alturas del año) edificado casi exclusivamente con un tipo de roca roja que le da mucha vistosidad, vimos el interior de iglesia más bonito de todo el viaje. Además de su colorido la Iglesia de Saint Pierre tiene varios arcos y columnas en su interior que la dan un aspecto muy llamativo y diferente.

  Desde ahí y casi sin demora, fuimos hacia un pueblo cercano llamado Turenne, que contrastaba con el anterior por lo blanco de sus construcciones. Es otro de los lugares que encontré gracias a "Las recetas de Julie" y no defraudó para nada. Aunque eso sí, de comida poco, ya que no había absolutamente nada abierto. Por lo cual, regresamos a Collognes, donde habíamos visto al pie de la carretera un lugar que parecía bueno para comer. Allí probamos el pato, que estaba riquísimo y entraba en el menú, por lo que no fue nada caro. El lugar (Le collongeois) muy acogedor y la comida más que rica. Además un personal muy amable al servicio.

  Descansados y con la panza llena, nos dirigimos hacia uno de los lugares, mas hermosos de todo el viaje, La roque gageac. Como hicimos alguna parada en el camino para aprovisionarnos y alimentar a la peque, cuando llegamos ya anochecía. Así que dimos una vuelta pequeña alrededor del parking en el que dormiríamos (había algunas caravanas y furgos más) y empezamos a dar por concluida la jornada turística.

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  Día 17

  Amanecimos para ver La Roque y.., una niebla del copón, que tapaba todo el paisaje. Viendo el panorama, decidimos desayunar tranquilamente, con la esperanza de que levantara. Pasada una hora más o menos, vimos que había levantado algo, pero no tenía pinta de que fuera hacerlo por completo. Así que, a caminar se ha dicho. Dimos una vuelta a otro pueblo fantasma, con la niebla lo parecía más aún y aprovechamos para sacar unas cuantas fotos con tranquilidad.
El pueblo es precioso, sencillamente de postal, aunque no pudiéramos disfrutar por completo la imagen del río con el pueblo incrustado en la roca de fondo. Aún así, el verlo sumergido en esa niebla permanente, le dio un encanto especial.

  Desde ahí fuimos a otro de los maravillosos lugares que tiene esa zona de Francia, Rocamadour. Esto era otro cantar. Aquí ni el frío priva del turismo y había bastante gente. No me imagino como tiene que ser el lugar en primavera-verano. A parte de la incuestionable belleza del lugar, Rocamadour tiene el atractivo de que fue construido alrededor de un santuario incrustado en una roca donde encontraron el cuerpo de San Amador. de ahí viene el nombre. Disfrutamos bastante la visita, ya que cada paso que das deja un detalle. Aunque no se si es recomendable en época veraniega, ya que no hay mucho aparcamiento para la cantidad de turistas que supongo acudirán y el lugar infectado de gente, debe de perder bastante encanto.

  Acabada la visita, fuimos hasta Najac, donde ya llegaríamos para dar un corto paseo y dormir.

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  Día 18

  Con un cielo bastante lluvioso amanecimos en Najac, lugar que habíamos apuntado tras ver varias recomendaciones sobre el en páginas de turismo francés. No se si sería la época del año, el cansancio del viaje, el día lluvioso o simplemente nosotros, pero no encontramos al lugar el encanto esperado. Investigando a la postre, llegué a la conclusión de que es una zona muy apta para hacer senderismo y quizá de ahí venga su fama. El caso es que tras un cortito paseo que no nos aportó mucho mas que un desayuno en un bar bastante caro, tomamos carretera hasta Cordes-sur-ciel.
 
  Habíamos anotado el lugar casi de refilón y aunque la lluvia nos limitó muchísimo(como caía agua) pudimos disfrutar de un pueblo muy atractivo para el turista y además aprovechar para hacer los deberes, en forma de llevar algún detalle, que no habíamos hecho en todo el trayecto. Se ve que tiene bastante afluencia de turismo también, ya que tiene unos cuantos comercios de venta de productos de la zona. Así que compramos algún bizcocho de castañas y unas mermeladas, que además de tener buena pinta debían de saber bien, ya que los receptores de los regalos no nos dieron ni a probar 

  Acabada la visita de forma prematura, tomamos ahora sí el camino directo de vuelta a casa, haciendo noche en un centro comercial cercano a los pirineos.
  Desde ahí ya iríamos al día siguiente directos hasta Segovia para celebrar la noche vieja, atravesando el pirineo aragonés(como mola, por cierto).















  Hasta aquí la crónica de un viaje, que deja como conclusión la tranquilidad de haber paseado por muchos pueblos turísticos en unas fechas en las que están totalmente deshabitados, pero también la parte negativa de no haberlos visto con un poco más de vida, ya que a veces si se notaba que les faltaba la parte de chispa que da la gente.

[crapochi]

Una pasada de viaje.
Yo te quería preguntar por las zonas de protección del aire de ciudades como Estrasburgo o París, si llevabas pegatina, si hay indicaciones al entrar en ellas... ¿o todavía se puede circular libremente?

[Peruconexion]

Una pasada de viaje.
Yo te quería preguntar por las zonas de protección del aire de ciudades como Estrasburgo o París, si llevabas pegatina, si hay indicaciones al entrar en ellas... ¿o todavía se puede circular libremente?

Pues no vi nada sobre eso. En Estrasburgo había un montón de seguridad y pasamos algún control y no hubo problema.
En Paris solo entramos con el coche la noche del 24 y no vimos nada. Aunque si vimos q los coches aparcados tenían todos una pegatina como de un permiso.
La verdad no se si de necesita algún permiso especial o no para entrar

[Warda]

Una pasada de viaje.
Yo te quería preguntar por las zonas de protección del aire de ciudades como Estrasburgo o París, si llevabas pegatina, si hay indicaciones al entrar en ellas... ¿o todavía se puede circular libremente?

Hola Caprochi.En esta dirección (lo colgué en febrero y ha pasado desapercibido) tienes información sobre esas zonas https://www.furgovw.org/index.php?topic=344523.msg4368213#msg4368213

Rosa

[zipi]

 
Fantástica crónica y fantástico viaje.
Enhorabuena!

[Trencalòs]

Me anoto la ruta!! ..... 

[Gueti]

Me anoto la ruta!! ..... 

Yo tb 

[BUFFALO]

otra pendiente...

[rumariuu]

me ha gustado mucho la crónica, las fotos muy chulas